Creo que sí, y también intento creerlo, pero en el fondo se que no; que por mucho que me esfuerce no puedo, se le puede mentir a todo el mundo menos a uno mismo. Y el caso es que , aún apresurándome, me atrevo a decir que no quiero seguir, quiero dejarlo. El ambiente estupendo, pero nunca cuatro folios me habían pesado tanto; no lo quise, no lo quiero, ni lo querré.